Llevar alegría a los enfermos

María Fernanda, Kristel, Isela y Mar, estudiantes, viven el Año de la Misericordia realizando actividades de voluntariado en el Hospital Regional de León, Guanajuato.

Kristel, María Fernanda, Mar e Isela visitan a los niños del Hospital Regional de León cada sábado.

¿Qué hacen para vivir el Año de la Misericordia?

Kristel (K): Hacemos servicio voluntario en el Hospital Regional de León. Visitamos a los niños de oncología pediátrica, que son los pacientes con cáncer. Pasamos tiempo con ellos, platicamos, les preguntamos qué les gusta, cuántos años tienen, sobre su familia. Y también hablamos con sus mamás para distraerlas un poco. A veces, les llevamos estampitas y juegos.

María Fernanda (MF): También les llevamos dulces o nos vamos con algún disfraz para animarlos y para que vean algo diferente.

¿Sobre qué platican con las mamás?

Mar (M): Usualmente vamos y jugamos con los niños, pero a veces pasa que están muy chiquitos y no puedes jugar con ellos. Entonces, platicamos con las familias que están ahí, porque ellos sufren tanto como los pacientes. A las mamás tratamos de no hablarles de la enfermedad, sino sobre cosas más agradables, como qué les gusta hacer, por ejemplo. Preguntamos si son católicas, porque también tenemos que respetar las diferentes creencias.

Las voluntarias reciben formación cristiana en un centro del Opus Dei en León, Guanajuato.
¿Planean hacer otras cosas relacionadas con el Año de la Misericordia?

MF: Pues estoy tratando de invitar a mis amigas al Hospital, platicándoles de qué se trata el Año de la Misericordia. Creo que esto es muy importante porque las personas que nos rodean son las que nos conocen más, entonces pienso que puedo hacer algo importante por mis amigas.

Isela (I): Me gustaría poder explicarles qué es el Año de la Misericordia y poder enseñarles sobre las obras espirituales y materiales para que podamos vivirlas juntos.

M: Estamos viendo si se pueden abrir otras actividades. Nos gustaría tener la posibilidad de dar catecismo a los niños que están en el hospital.

¿Qué les ha dejado esta experiencia?

K: A veces pensamos que estamos pasando por situaciones difíciles, pero éstas realmente no se comparan con lo que viven a diario estos niños. Da otra perspectiva. Ves a niños que no tienen ni diez años, pero que ya están luchando por vivir.

I: Ves que tus problemas son mínimos. Esto también me ha ayudado a crecer como persona.

M: Me ha ayudado en muchos sentidos. Primero, en no ser tan egoísta y darme cuenta que no nos cuesta nada dar un poquito de nuestro tiempo. Y también porque al principio tú piensas que los vas a ayudar a ellos, pero la realidad es que ellos te enseñan muchas cosas.